Estamos posiblemente ante la última evolución del broquel antes de que desapareciera, de hecho es interesante apreciar como en este tipo de targas, realizadas con la combinación de piel, cuero, madera y lienzos, ya la parte estética toma un papel relevante frente a la resistencia.
Una vez la tienes en la mano, es francamente ligera (775 grms) y de gran prestancia. La evolución de este tipo de broqueles sigue a la de la espada, que pasaría a ser complemento junto a la vestimenta que no debía deslucir. Incluso su uso sería más bien ocasional, por ejemplo para el uso frecuente que le damos en una sala, no envejecería precisamente muy bien versus una de acero. Posiblemente en la vida real por el contexto de la época ya sucediera así, su uso sería civil y fortuito, más que militar.
En este caso he usado solo
cuero de gran grosor, en los referentes históricos hay combinaciones con
láminas madera o múltiples capas de cuero. Adjunto algunas referencias
históricas que he usado de inspiración y partes del porceso de fabricación.